El sistema financiero internacional es bastante complejo de entender para una persona con poca experiencia en economía. Las entidades bancarias, viven en gran medida de las comisiones e intereses de los capitales que manejan. En ocasiones, los préstamos que se estructuran a los clientes de los bancos, pueden llegar a ser insostenibles.
De hecho, hoy en día, es muy común que una persona se ahogue en deudas tras el uso de las tarjetas de crédito. Los bancos las ofrecen como una fantástica alternativa para tener dinero a la mano. Pero a cambio, aparte de pagar una cuota de manejo, debes pagar ciertos intereses al banco por las compras que realizas con las tarjetas.
Y a medida que el usuario de la tarjeta hace uso de ésta misma, el monto que debe se acumula. Es muy común entonces que muchas personas decidan obtener una segunda tarjeta de crédito para obtener el dinero para pagar la primera. Es así como se establece un lío financiero difícil de solucionar.
Acudir a un reparador de crédito
Si estás viviendo un problema similar o si tienes una deuda que no has podido pagar en tu entidad bancaria, probablemente lo mejor que puedes hacer es acudir a un reparador de crédito. ¿Qué es un reparador de crédito? Eso puede resumirse en el siguiente listado:
- Un reparador de crédito es una persona que cuenta con solvencia monetaria.
- Su misión es la de brindarle apoyo a una persona para saldar sus deudas u ofrecerle dinero para sus emergencias.
- Lo que hace el reparador de crédito es asumir en gran medida la deuda que posees.
- Y la reestructura para que te sea más fácil pagar el capital que adeudas.
- Se estima que la gestión que realiza un reparador de crédito puede reducir tus deudas en un porcentaje de 30% a 50%.
- ¿Por qué? Porque asume la labor de darte una alternativa donde ya no tendrás que pagar los intereses bancarios que estableció la entidad que te prestó el dinero.
¿Cuál es entonces la ganancia que obtiene el reparador de crédito? ¿Por qué una persona podría actuar de manera tan bondadosa sin obtener una ganancia a su favor? Son preguntas claves a considerar y muy lógicas de tener presente teniendo en cuenta cómo se mueve el mundo financiero hoy en día.
Sí, por supuesto, el reparador de crédito si obtiene una ganancia a su favor. Su ganancia está en que logrará reducir los intereses ante la entidad bancaria a la que perteneces. Por ejemplo, si estás realizando un pago mensual donde la cuota de interés es del 3%, el reparador de crédito te plantea una solución donde el saldará la deuda en el banco. Y a cambio, te exigirá que pagues el 1,5%.
En otras palabras, él o ella zanjan la situación ante la entidad bancaria realizando el pago total de la deuda. Pero a partir de entonces tu responsabilidad es pagarle al reparador de crédito, asumiendo un tipo de interés mucho más bajo. Todo depende del tipo de reparador de crédito con el que te asocies.
No es intermediario bancario
Es importante considerar que un reparador de crédito no es un agente bancario. Lo que realidad realiza esta persona es actuar como un agente externo. Es decir, es alguien que te presta dinero y con el que llegas a un acuerdo a través de un contrato firmado.
Generalmente, el reparador de crédito decide cual será el porcentaje de interés que deberás pagar. E igualmente establece el número de meses en los que estarás pagando la deuda. En resumen, se trata de una persona que “desafía” el sistema bancario y decide redefinir los tipos de deudas de las personas.
Es importante dejar en claro también que el rol que ejercen estas personas también es la de prestar dinero. Así que si te encuentras en una emergencia, ellos podrán darte el apoyo que necesitas sin tener que pasar por un serio proceso de documentación y requisitos, que es lo que suele ocurrir con los bancos.
Hoy en día, los reparadores de crédito suelen asociarse a través de plataformas oficiales como la nuestra que es: https://pezetita.mx/. A través de nuestra web puedes contactarte con personas que te ayudarán a prestarte el dinero que necesitas, sin ni siquiera tener que develar el historial crediticio o buros de crédito.